Peces -CIPRINODONTIDOS-

Los Ciprinodóntidos son peces de dimensiones muy modestas o pequeñísimos, dotados en su mayoría de una librea variopinta que los hace muy busca­dos por los acuarofilos. A despecho de su pequeña talla y de su aspecto agraciado, son voraces predadores de insectos, hasta el punto de ser empleados en lucha biológica contra los mosquitos. Su aspecto exterior es bastante variado pues, junto a especies ágiles y esbeltas, se encuentran otras rechonchas y robustas. La boca es terminal y protráctil, dotada de pequeños dientes puntiagudos, que pueden estar dispuestos en varias filas. Sis aletas suelen tener un desarrollo excepcional y a veces son enormes, excepto las pectorales. Casi siempre se observa un cierto dimorfismo sexual, con el macho algo más grande y coloreado que la hembra. Son peces ovíparos y su estrategia reproductiva varía notoriamente de una especie a otra. Están difundidos en todas las regiones tropicales de la Tierra. 

1. Aphyosemion gardneri (Killi)

Este pez es un típico habi­tante de los pequeño embalses de agua oscura de la selva húmeda africana, sujeta a bruscas variaciones ambientales. El cuerpo tiene una forma alargada y elegante, con la boca dirigida oblicuamente hacia arriba. La aleta dorsal está en posición retrasada sobre el dorso aplanado. El macho pueden tener una librea tendente al azul con punteados o dibujos carmín o bien una coloración predominantemente amarilla. Los bordes de las aletas dorsal y anal se distinguen por una neta línea roja orlada de amarillo en su parte externa. El mismo motivo se retoma en los bordes superior e inferior de la cola. Esta última tiene forma de li­ra en el macho y redondeada en la hembra, que se distingue además por sus menores dimensiones y por una coloración de fondo pardo dorada. 
Su alimentación es bastante voraz, acepta tanto alimentos vivos (tubifex, pulgas de agua, cyclops, larvas de mosquito, lombrices) como alimentos desecados, el comportamiento los machos son capaces de arrancarse las aletas unos a otros, por lo que conviene criar pocos ejemplares junto con varias hembras, su reproducción, debe introducirse una pareja en una pecera con plantas de hoja menuda. Algunos acuariófilos utilizan nidos artificiales hechos con moñitos de nailon adheridos a soportes flotantes. Este sistema resulta práctico para po­der recoger los huevos a medida que son depuestos. Éstos deberán dejarse ma­durar en contenedores especiales llenos de agua de la pecera de reproducción. Una vez han hecho eclosión, las crías se alimentan con nauplios de artemia. 
La pecera puede ser pequeña pero deberá contar con vegetación espesa y fondo oscuro. La temperatura del agua estará comprendida entre 20 y 24 °C, con un pH ligeramente ácido y una dureza no superior a 10 °dGH.

2. Aplocheilichthys normani (Ojo luminoso)

Las especies del género Aplocheilichthys frecuen­tan las capas más super­ficiales de los embalsa­mientos de agua de las selvas del África tropical, en que viven dando caza a los insectos. Según al­gunos estudiosos las pre­sas son atraídas por los grandes ojos luminosos que caracterizan a estos pequeños peces. El cuer­po es fusiforme, con la boca dirigida hacia arriba. Las aletas, excepto la caudal, no están muy desarro­lladas. El macho presenta una librea casi uniforme de color plateado, animada en el lomo con matices azulados. Algunos ejemplares tienen manchas amarillentas en las aletas. Durante la fase de acoplamiento las aletas ventrales se vuelven os­curas y la caudal bordeada de negro. La hembra, en cambio, tiene una colora­ción menos intensa y aletas transparentes,la alimentación, este pez se alimenta de toda clase de comida viva: dafnias, lar­vas de mosquito, tubifex, etcétera. De vez en cuando se le puede suministrar pienso en escamas de dimensiones adecuadas (muy pequeñas), el comportamiento del Aplocheilichthys normani es un pez de índole pacífica, in­cluso tímida, que se asusta con facilidad. Vive preferentemente en bancos y conviene criarlo con especies que habitan en el fondo y las regiones centrales de la pecera.
Puede producirse en el mismo acuario de cría pero después de la deposición de los huevos, bastante grandes, deben ser trasladados a pe­queños recipientes de 5-8 litros para favorecer su eclosión, que tendrá lugar al cabo de unos 15 días. Las crías son muy sensibles al cambio del agua y necesitan mucha comida viva; una intensa iluminación facilita y aumenta su crecimiento. Es indispensable un buen filtrado y una cuidadosa limpieza de la pecera. 
La pecera, que puede ser pequeña (30 litros), debe tener el fondo oscuro y con­tar con plantas en la parte de atrás y escondrijos entre las raíces. El pez necesita de zonas abiertas para poder nadar con libertad. La temperatura del agua se mantiene entre 22 y 25 °C , con una dureza en torno a 10 °dGH y ligeramente áci- da, con un pH 6.5-7. 

3.Aplocheilus lineatus 

Esta especie india pre­senta la conformación típica de los peces de superficie, con cabeza y dorso deprimidos y aleta dorsal muy retra­sada y situada cerca del pedúnculo caudal. Las aletas pectorales son de notable tamaño y robustez, mientras que las ventrales son pequeñas. La cola tiene forma de espátula y la aleta anal presenta un notable desarrollo. La parte superior del cuerpo muestra una coloración marrón oliva, mientras que el vientre, incluidas las aletas ventrales y pectorales, es amarillo; el lomo es pardo rojizo punteado de dorado. Todas las aletas tienen dif urina­ciones rojizas. La hembra es más pequeña que el macho y presenta una colo­ración de fondo más clara, con 6-10 franjas verticales negras más marcadas. La aleta dorsal tiene un punto negro en la base. 
Esta especie se alimenta preferentemente de insectos, que en estado natural captura saltando en la superficie del agua. En el acuario la die­ta puede consistir en cualquier tipo de comida, sea ésta viva o en escamas. 
Es un pez predador muy agresivo. Conviene por tanto criarlo con ejemplares de su misma talla. Los machos se amenazan efectuan­do paradas, pero no llegan a combatir. 
La reproducción, La pareja, que se habrá introducido en un acuario de unos 30 litros, depone los huevos a intervalos durante algunas semanas. Éstos de­ben ser trasladados a pequeños recipientes de cristal, cuya agua se cambiará con frecuencia. Las crías salen a la luz al cabo de 12-18 días y deben trasla­darse a su vez a una pecera de cría con las mismas características que la de reproducción. Deben ser alimentadas con nauplios de artemia recién nacidos y, como alternativa, con pienso seco pulverizado. 
La temperatura del agua estará comprendida entre 24 y 28 °C, la dureza será baja (5 °dGH) y el pH ligeramente ácido (6-6,5). La iluminación debe ser es­casa ya que el pez teme a la luz intensa. La aireación y el filtrado de la pece­ra deberán ser siempre buenos. Conviene tapar la pecera porque el pez suele saltar fuera del agua. 

4. Epiplatys chaperi 

El nombre del género Epiplatys se refiere al perfil casi rectilíneo de la parte su­perior del cuerpo, que constituye una adaptación útil a la vida de superficie que estos peces desarrollan en estado natural. La conformación de la espe­cie es fusiforme con la boca típicamente dirigida hacia arriba. Las aletas son bastante desarrolladas, así como la cola, y la aleta dorsal está situada en posición retrasada. La librea es de color amarillo oliváceo recorrida por 5-6 ban­das transversales negras incompletas. El macho presenta una coloración más acentuada, con el dorso salpicado de numerosas manchitas rojas y la mandí­bula de color rojo vivísimo; tiene además el lóbulo inferior de la aleta caudal acabado en una breve punta. La hembra es más pequeña y presenta aletas menos desarrolladas.
El pez acepta sin problemas alimentos vivos, como tubifex, larvas de pulgas de agua, cyclops, drosófilas, pequeños peces, pero también comida desecada
Es un pez muy pacífico que no crea problemas de convi­vencia con otras especies. Aun siendo de dimensiones reducidas, es un voraz predador capaz de engullir cuantos peces le quepan en la boca: conviene por tanto criarlo con peces de talla análoga.
La especie se reproduce con éxito en el acuario. Hay que introducir una pareja en una pecera llena de agua muy vieja y arreglada con plantas flotantes. La hembra libera un solo huevo cada vez (en total, 15-20 en una jornada), que es fecundado inmediatamente por el macho y acto seguido se adhiere a la vegetación. La misma pareja continúa realizando una deposi­ción semanal, durante varias semanas. Las puestas deben trasladarse, una tras otra, a un contenedor poco profundo lleno de agua sacada del acuario de reproducción. La eclosión tiene lugar al cabo de 15-20 días y las crías se ali­mentan con nauplios de artemia en las peceras separadas hasta que estén lo bastante crecidas para introducirlas en el acuario grande.
La pecera contará con abundante vegetación, entre la cual habrá diversas plantas flotantes. La temperatura del agua estará comprendida entre 24 y 28 °C, con un pH ligeramente ácido y una dureza no superior a 10 °dGH.

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